domingo, 1 de agosto de 2010

Patty Ice



Cuando baila parece la sombra de su sombra. Vive en el psiquiátrico que edificaron junto al cerezo aprovechando las ruinas de un antiguo almacén de sombreros. Patty Ice baila huyendo de la gravedad. Los días en que el cielo presagia tormenta su cuerpo se lanza imprevisible como una galerna contra el árbol y lo toma como pareja de baile. Ciñe su cuerpo a la corteza y se deja rodear por los brazos leñosos del céfiro enraizado. Y baila.

el lápiz del traductor



Llegó el día en el que el lápiz sólo escribía su autógrafo. El autógrafo del traductor. Aparecieron restos de escamas en la mina y un hombre aún borracho y supersticioso escupió sobre el vagón . Dentro todo era oscuridad porque se había agotado el aceite de las lámparas y esperaban. Al principio se escucharon voces y conversaciones frívolas, bromas y un silbido largo que quería ser una canción. Después, se fueron silenciando. Y aunque tenían los ojos abiertos no veían nada, así que algunos los cerraron instintivamente . Cada hombre una reserva opaca, una rubrica.

lo que Patty Ice contó al traficante de sal



No podría darte un sólo nombre de los muchos que guarda en su apariencia siempre en viaje. Mi traductor duerme, y en sus sueños un fuerte viento del sur se lleva las palabras. Una vez en Kenroku terminaba abril y cayó una flor de kikuzakura. El se guardó el lápiz con el que había abandonado la traducción y en voz baja comenzó a describir la flor. Cuando hubo dado nombre a los trescientos pétalos enmudeció.

lo que el traficante de sal contó a Patty Ice



He recibido una llamada. Desde el museo británico un vigilante nocturno me dice que ha visto entrar al traductor en el cuadro que representa la gran ola de Kanagawa. Se metió en la estampa, dentro del azul de prusia. Tal vez de la misma manera se interna en los jardines, buscando ser tragado por la inclinación de llegar a ser imagen que hay en ellos. No volverá a traducir si busca en los jardines el paisaje que sustituya el instinto del bosque.

Olvido Express



Olvido Express murió cuando vio su casa incendiarse en la región de Nizhni Novgorod .De forma milagrosa y entre los escombros se escuchó desde un gramófono la opera deRimski Korsakov, Kascheí el inmortal. La música se elevó durante la larga oscuridad por encima de las llamas. Al otro lado de la calle, un vecino en otro tiempo seguidor de la iglesia ortodoxa, hacía arder una pilastra de iconos en el pequeño patio trasero de su vivienda. La doble columna de humo vino a unirse por el fuerte viento que soplaba aquel verano. Sobre las ascuas ardientes de la mañana Olvido Express tuvo una visión inefable y antes de irse me habló de la aguja aún candente del gramófono que estaba dentro de un huevo, que estaba dentro de un pato, que estaba dentro de una liebre, que estaba dentro de un arcón, que estaba enterrado bajo un árbol en la isla de Buyan.

Patty Ice y Larie Lake



Patty Ice había elegido como acompañante y testigo a un viejo general que escondía parte de su ración de comida para dársela a una garduña enferma que encontró en su cuarto. Desde que la tomó bajo su protección el animal en más de una ocasión le había sorprendido mientras dormía lanzándole un fuerte mordisco allí donde el uniforme, que nunca se quitaba, dejaba libre a la carne. A pesar del daño nocturno el general permaneció fiel a quien había adoptado como su protegido. Tal vez fuera por eso por lo que Patty Ice le anunció su deseo de que le acompañara de madrugada al claro del bosque donde tendría lugar el duelo. El motivo de la afrenta fueron las palabras que Larie Lake dejó caer aquella tarde : el traductor no es real.
Una frente a la otra a doce pasos acordados de la linea de demarcación a la hora fijada. La escena parecía la réplica de un mundo paralelo.

Valeria



La habitación de Valeria es un cubo perfecto. Allí unas veces se tiende de lado en la cama, mirando hacia poniente, donde está situada la ventana. A pesar de no tener cortinas han instalado una mosquitera cuya veladura gris confiere al jardín otra distancia, más allá del otro lado del marco, un oasis galáctico venido de lejos se deja intuir en un tono neutro y desenfocado, como tarde que atrae el último verso . Paisaje que Valeria transita en una nave dentro de su cuerpo .

miércoles, 28 de julio de 2010

sexto jardín



Existe un lugar en el psiquiátrico desde donde se ve el jardín a vista de periscopio. En los sótanos hay una cámara abandonada y una pequeña rendija de ventilación deja entrar una trama irregular de sombra y luz. Para acceder a ella se aprovecha una vieja caja de madera olvidada de la antigua fábrica de sombreros . Para subirse a ella es necesario apoyarse en unas hendiduras en el yeso y elevarse de puntillas para que los ojos alcancen a ver el exterior . Este es un lugar para ver sin ser visto. Pero aquello que se ve es sólo una parte cuyo horizonte rompe a diez centímetros del suelo. Desde aquí la imagen que del paseante se tiene son pies calzados en botas de cuero, sandalias, zuecos y alguna vez un par de rebeldes pies desarropados que vuelven sobre sus pasos de espaldas. Para que las huellas del traficante de sal coincidan con las huellas del traficante de sal.

viernes, 16 de julio de 2010

Cherry



Cherry es una mentirosa. Dice que vivió con un escritor suizo en una cabaña de madera cerca de un lago. Cuenta que aguantó mil y una noches recostada en la alfombra frente al fuego con una copa de bourbon mientras escuchaba pacientemente la lectura de la novela del escritor . Nos dijo que la mañana del día mil dos tomó el primer autobús que pasó por el sendero y desde allí voló a Praga. Dice que el escritor se despidió de ella tendiéndole su dirección en un papel manuscrito y arrugado prometiéndole visitarla . Días después Cherry envió un paquete envuelto en papel de estraza a esta dirección . En su interior había un desplegable en forma de acordeón con postales de los monumentos y lugares más emblemáticos de Praga. También había envuelto en plástico de burbujas una botella de cerveza comprada en Karlovy Vary, y un cd con música de Smetana, subrayando en la carátula la pieza dedicada al Moldava. Junto a estos pequeños obsequios envío recado en una nota, sugiriendo al escritor de lo innecesaria y baldía que resultaba aquella visita pues ya había visto el imaginario de su nueva vida en los objetos.

jueves, 15 de julio de 2010

lo que Patty Ice contó al traficante de sal


Me pides una descripción del traductor . La única certeza que tengo sobre su persona es el relato de tus viajes en su búsqueda, y una impresión remota de la forma en la que se posa la luz sobre el mundo. ¿Puedo a esto llamar recuerdo? , pues junto al temor de no encontrar al traductor se mezcla el desasosiego de las noches en vela donde presiento su figura irreal, donde las tinieblas desadormecen la duda. Pero qué injusta soy , conociendo la generosidad de tu empresa, los barcos perdidos , ¿no es acaso tu periplo una prueba de su existencia?

miércoles, 30 de junio de 2010

el viaje del traficante



Se escucha un coro al final de la avenida Nevski. Las lejanas voces imitan a un ejército de unicornios de papel atravesando los bosques. Los vencejos también parecen oírlo y vuelan enloquecidos desde un río cercano buscando la sombra de los aleros en los tejados. El traficante de sal hubiera querido correr hacia el final de la calle y encontrarse con las voces, pero ha quedado con una linotipista a la que tiene que dictar con urgencia un mensaje . Al llegar a su apartamento se precipita hacia el balcón y lo abre. No se han ido, aún se oyen, esquivando los árboles con sus cuerpos de papel. La linotipista se estira la falda hasta las rodillas, lo mira y queda a la espera. El traficante de sal cierra los ojos desde el balcón para escuchar mejor el coro y comienza a dictar.

domingo, 20 de junio de 2010

Patty Ice y Larie Lake



Querida Larie,
el psiquiátrico no es un lugar tan malo. Tenemos un jardín abandonado y el estratega, un interno que vino de la guerra, me proporciona mapas para mirar. En lo alto de la colina hay un quiosco de música donde se puede bailar al caer la tarde si no te ve nadie. Casi todos los años recibo noticias del traficante de sal donde me cuenta sus progresos en la búsqueda de mi traductor. Dibujo barcos encallados en las montañas . Han aparecido lápices en mis bolsillos y pienso que este pueda ser el lugar donde se almacenan las señales mudas de su escritura .

Querida Patty,
el psiquiátrico es un lugar extraño. Todos llevan el pelo desordenado y aunque no se salen del camino que marca la tierra junto a la vegetación les veo caminar en una suerte de rumbo amotinado. Me acuerdo de las olas y del vértigo buscando cosas azules en el jardín. Tengo un tapón y un trozo de tela y esta misma mañana encontré un hilo. También me llaman el resto de las cosas porque no son azules. Los nombres que toman las cosas que descarto y no guardo en los bolsillos .

jueves, 17 de junio de 2010

Olvido Express



Olvido Express murió atrapada en la puerta giratoria de un mítico hotel francés. Días antes se había entrevistado con el carpintero que ayudó a Marcel a montar su puerta doble en el apartamento del número 11 de la rue Larrey de París. Recordaba haber escuchado a los lobos aullar detrás de las puertas y a la ventisca azotarlas . O tal vez fueran niñas de domingo.
Pero antes de perderse en el cristal pasó la mano con la palma hacia arriba por el pulido suelo hasta alcanzar suavemente entre los dedos índice y anular una peonza que bailaba en la tarima y tendiéndola aún en movimiento sobre mi mano me miró y me dijo , ¿notas las cosquillas?

Patty Ice



Patty Ice estaba cerca de Detroit parada en el arcén de una carretera secundaria en el interior de un Buick rosa con viejos asientos de piel. Desde el asiento del copiloto miraba distraida el cuadro de mandos mientras tamborileaba con los dedos el precipicio de sus rodillas.Llevaba las uñas pintadas de rojo y sus manos eran tan blancas que parecían dos cajetillas de malboro . Sacó una cinta de cassette de la guantera y comenzó a deshilvanarla como quien tira de un brillante pétalo inacabable de color chocolate. Salió de coche y corrió atravesando los campos mientras agitaba la serpentina dibujando con ella formas en el aire. Tensando hacia el sol un pequeño fragmento que se rompió enredándose en un espino creyó ver la radiografía de un finísimo pentagrama. Los restos del baile quedaron a la intemperie.

jueves, 3 de junio de 2010

quinto jardín





El quinto jardín se oculta en la maleza que ha invadido de broza y basura el solar de la desaparecida fábrica de sombreros Medrano. No he perdido la esperanza de encontrar al traductor . En parte de la fachada que queda en pie vuela medio balcón donde los gorros han encontrado su nicho en las macetas. Una pamela esconde una salamandra y cerca de ella, camuflado entre los dientes de león, se intuye la forma de un borsalino. Un canotier frances se rinde al pico de un gorrión y reposa en el arranque quebrado de una viga . Como traficante de sal no se de la belleza de matorrales y sombreros. Vuelvo sobre mis pasos.

miércoles, 2 de junio de 2010

Cherry




Cherry es una mentirosa. Dice que vivió en la oreja de Dioniso ,en la ciudad de Siracusa , como concubina de un arquitecto sirio que le regaló un puente de termitas que cruzaban el bosque en dirección al mar. Habla de la humedad en el interior de los pabellones y de cómo lo vió llegar con su toga púrpura y depositar en la piedra un cesto con frutas. Que en aquel lugar yermo , donde sólo la voz cobraba vida , aquel bodegón improvisado inauguró una nueva era donde el eco del verbo eran limones amarillos.

jueves, 20 de mayo de 2010

lo que el traficante de sal contó a Patty Ice




No he vuelto a la ciudad de Nis. Escuché la historia de un inmigrante serbio que decía haber visto al traductor en la torre Cele Kula. Tratando de cegar la visión del horror escondió su rostro en la oquedad que dejó una de las cabezas estirpadas al muro . El viento, el agua y los días habían erosionado el vacío hasta cincelar un embozo mineral que se ajustaba al semblante estremecido del traductor como el doble a su doble.

martes, 18 de mayo de 2010

el lápiz del traductor


Молчи, скрывайся и таи
И чувства и мечты свои -
Пускай в душевной глубине
Встают и заходят оне
Безмолвно, как звезды в ночи,-
Любуйся ими - и молчи.

Как сердцу высказать себя?
Другому как понять тебя?
Поймёт ли он, чем ты живёшь?
Мысль изречённая есть ложь.
Взрывая, возмутишь ключи,-
Питайся ими - и молчи.

Лишь жить в себе самом умей -
Есть целый мир в душе твоей
Таинственно-волшебных дум;
Их оглушит наружный шум,
Дневные разгонят лучи,-
Внимай их пенью - и молчи!..


Tiútchev . silentium!

Quiso el traductor escribir todas las estrellas de nieve que cayeron sobre la estepa antes de llegar la primavera del año cuarenta. Y escribir las vías de tren que se internaban en el bosque . A la mujer que recitaba poemas con vodka y frío sobre caminos de carne humana rebosantes. Escribir los testigos ojos mudos y el aliento de vapor en las bocas de los hombres . Escribir la tristeza de los elefantes y la espera de la estación de las lluvias. Y vió el traductor retorcerse la recta dureza del lápiz en su mano y revelarse luchando contra el papel y apuntar el filo del grafito a su frente y gritarle, silencio!

miércoles, 12 de mayo de 2010

Valeria



Valeria vive inmóvil . Tiene una extraña enfermedad por la que sólo reconoce el perfil del mundo, el perfil de los objetos, el perfil del paisaje, el perfil de las palabras, el perfil del amor. Valeria se queja a los médicos que han venido a visitarla desde todos los rincones del planeta . Les dice que la civilización occidental ha levantado ciudades y fabricado objetos para ser vistos frontalmente y que ella permanece ciega en ese punto, no puede desplazarse porque puertas y rostros permanecen invisibles a su ojos. Como no puede ver la pantalla del televisor observa los destellos que emite su luz. Como no puede ver a través de la ventana se detiene en el umbral .
a Valeria le gustan las formas esféricas y por eso le cautivan las naranjas y la luna, la silueta nocturna de la montaña y las palabras loco y ojo.

PattyIce y Larie Lake



El día del mes de Abril que Patty Ice se cayó de una ola tuvo que ser rescatada por el sueño. Los siete días que pasó durmiendo Larie Lake colocó un ammonites bajo su almohada esperando que al despertar traería con ella una visión del futuro. La mañana del séptimo día Patty Ice abrió los ojos y andó. En su memoria portaba un gabinete de curiosidades que había rescatado de los espacios en sombra tocados por la palabra.
El día del mes de Abril que Larie Lake se cayó de una ola tuvo que ser rescatada por el sueño. Los siete días que pasó durmiendo Patty Ice colocó un diente de tiburón sobre su pecho esperando que al despertar traería con ella una visión del pasado. La mañana del séptimo día Larie Lake abrió los ojos y andó. En su memoria portaba un gabinete de curiosidades que había rescatado de los espacios de luz que fueron tocados por el silencio.

lunes, 3 de mayo de 2010

Olvido Express




Olvido Express murió cuando se vió reflejada jugando la primera carta cubierta de la mano en un juego de naipes . En una suerte de búsqueda impía de tréboles sobre limos y arcillas en los casinos erosionó la mirada del croupier , haciéndolo esclavo unas horas antes de la partida. Cuando andaba a la caza de un siete de diamantes la fortuna cambió en sentido inverso en que giran las manecillas del reloj, y fue así que vió por primera vez la imagen que la mataría: su espejo en el lecho de la ciénaga .
Pero antes de morir me tendió los restos de la baraja y me dijo que tal vez el doble tiene prohibido jugar con el azar que supone encontrar el corazón del bosque.

miércoles, 28 de abril de 2010

Cherry

Cherry es una mentirosa , dice que durmió en Tanger cerca de un hombre tuerto que escribía medias verdades.La mitad de ellas en una lengua muerta. Cuenta que un día le pidió que llevara sus escritos a la plaza donde se reunían los ancianos a escuchar y que por los pasadizos del zoco perdió la mitad del manuscrito. Cherry dice que sustituyó las páginas extraviadas por medias mentiras de su puño y letra, y de estas escribió la mitad con palabras que nunca había escuchado ni leído. Cherry cuenta cómo una noche destapó el parche del tuerto y encontró un ombligo desterrado en una cara.

lunes, 19 de abril de 2010

Patty Ice

Baila, ahora que estás en la esquina del baile y te tapan las flores más altas del jarrón. Baila, Patty, como tu sabes, cruzando los pies como dos alfiles que nunca se encuentran, baila, en la pista de las horas cerradas al público. Baila por los pasillos que no son lugares definitivos. O debajo de las puertas, baila, quien te proclama confundido no sabe si llegas o vas . Contra tu imagen, baila. y contra tu especie y tu género. Atraviesa la barrera del sonido cuando chasquees los dedos al bailar y aun así, baila, concentrada y fugaz como las notas que parten .

sábado, 10 de abril de 2010

lo que patty Ice contó al traficante de sal



Dicen los vigilantes que la tarde que vieron salir al traductor el cielo se cubrió de una insólita nube de pólvora que cambió la luz. Al mismo tiempo algunos gobiernos firmaban tratados de independencia y los volcanes de Indonesia entraban en erupción. Estos sucesos extraordinarios pudieron ser la causa de que campos y edificios se vieran tamizados por una pigmentación incandescente que los volvía irreales. También nosotras, en el psiquiátrico, mirábamos los cuerpos y nos creíamos dioses...Aquello no podía durar. Una febril y anónima copia de la mañana después del diluvio de Turner fue colgada en el comedor cuando todo terminó.

lunes, 5 de abril de 2010

Patty Ice




Once upon a time, Patty Ice fue sola al baile y serena. Fue con un vestido azucarado , largo y con un escote discreto. Con zapatos acuáticos y frágiles de nostálgica porcelana de jarrón chino . Fue al baile con el tiempo que acecha a las flores que primero aparecen junto a las vías, amarillas y amapolas, de lejos tan salvajes.Patty Ice subió al baile por unas escaleras que bajaban por una alfombra roja y ya se escuchaba el sonido de la música inexorable del ahora. Mirad a Patty Ice cómo está yendo al baile con su traje azucarado y cómo está alzando levemente el largo bajo de la tela evitando el rozar de las muselinas en la escalera. Mirad las flores que no trae . En el travesaño están olvidadas, se pudren .

jueves, 18 de marzo de 2010

cuarto jardín

En el futuro, las torres serán un jardín. Desde su verde atalaya los hombres otearan los desiertos de los tártaros. Nadie vendrá. La ciudad se levantará como un colosal nenúfar púrpura sobre las aguas . La escritura y la palabra se habrán extinguido y sólo quedarán restos fosilizados en los fondos oceánicos. Y aunque los hombres habrán olvidado la voz de los nombres y el trazo revelador de su signo, continuarán a la escucha . Y oirán el rumor de los vientos alisios, y el azote de las hojas en las ventanas, creerán percibir el golpe seco de los cascos de los caballos levantando la arena en el desierto. A sus oídos llegará un día en las frondosas azoteas flotantes un canto de sirena ascendiendo sobre la linfa , lo más parecido a un sonido arcaico que guardan en la memoria de sus ordenadores, un sonido que anhelan y temen mientras permanecen a la espera. Allí todos serán traductores.

Cherry

Cherry es una mentirosa , dice que trabajó como camarera uniformada en un hotel cerca de Providence , donde reinaba el caos y vivía Lovecraf. Cuenta que su reino fueron los eternos pasajes de moqueta y los gemidos vespertinos de las hembras que acechaban desde los interiores sellados por puertas de cartón. Cherry cuenta que leía bajo las luces de emergencia los libros que abandonaban los clientes sobre las mesitas de noche , y que a todos faltaba una hoja. En algún lugar, entre la planta tercera y cuarta, dice que encontró la única página real del necronomicón. Nos explicó que Lovecraf erraba por los pasillos escoltado por dos tías maternas que habían sobrevivido a la guerra y a sus propias armas. Arropado por un batín cruzado y caduco arrastraba los pies dando sombra a los corredores a su paso. Cherry cuenta que no todos los días fueron iguales.

jueves, 11 de marzo de 2010

el lápiz del traductor

Una tarde lenta Patty Ice sorprendió al traductor en una rama del cerezo escribiendo sobre los insectos que escribían la historia de los hombres que escribían sobre tablas que escribían las leyes que escribían las sagas de los profetas que escribían sobre el futuro de los pueblos que escribían las batallas en los campos que escribían los muertos silenciosos que escribían el pasado de los vivos que escribían el devenir de los otros que escribían las palabras que escribían los escribanos sentados que escribían las esperas que escribían los tiempos rotos que escribían el olvido que escribía la tierra que escribía las raíces que escribían las estaciones que escribían el ciclo que escribía la copia que escribía lo singular que escribía la metamorfosis que escribía un nombre que escribía el traductor .

martes, 2 de marzo de 2010

el viaje del traficante

El traficante de sal andó hasta un punto cualquiera de un plano. En el decurso de su trayectoria fue dejando pisadas hasta llegar a un pueblo en la frontera . El traficante de sal estudió durante la noche la anatomia de su viaje buscando al traductor. De la descomposición de cada movimiento, cada giro, cada huella, cada cruce de caminos, cada encuentro con los otros , compuso una nueva cartografía. El bosque ve la costa en la periferia que cubren los ultimos árboles antes de abrirse a la arena. Dentro la herrumbre del musgo señala el norte. Saliendo de la espesa oscuridad ,el claro. El avance de las dunas entre grama y alisos, y el agua impenitente, cercándolo todo. El bosque se ve atravesado por una lanza de luz violenta .La lluvia no cesa. El traficante de sal sale de su letargo y se ve . No se ha movido de allí, en mucho tiempo.

viernes, 26 de febrero de 2010

Olvido Express


Olvido Express murió atrapada en una cadena de montaje. A las cinco sonó el despertador conectado a la radio: Eleanor Rigby . Olvidó Express se giró y miró durante diez minutos el papel pintado de la pared: el ladrón de fresas , un ruiseñor común sobre un fondo oscuro iluminado por la vegetación del jardín se multiplica hasta el infinito.Un ruiseñor perdido en una pared nazarí.Desayunó en la cocina y antes de darse una ducha recogió las migas que habían caído en el banco.Quedaba poco champú , si se acordaba a la vuelta preguntaría en la tienda del barrio por uno con perfume de coco que había visto anunciado en televisión. Repasó el fondo de los bolsillos de la gabardina para asegurarse que llevaba las llaves del coche y de la casa. Tocó el botón que nunca recordaba coser. Bajó por la escalera porque el ascensor estaba ocupado , Ya era tarde.Tuvo suerte. Casi todos los semáforos estaban en verde. Dejó el coche a las seis y veinticinco en el aparcamiento de la fábrica junto a la puerta cuatro. La cinta transportadora se llevó a Olvido Express antes del almuerzo, cuando quedó enganchada con el pañuelo de flores que llevaba atado al cuello . Pero antes de perderse entre las máquinas me miró y me dijo que a las cuatro tenía que sacar a pasear un perro.

miércoles, 24 de febrero de 2010

lo que el traficante de sal contó a patty Ice

Las máquinas han vuelto, tiemblan de anemia bajo el acero. Me coloqué con la polaroid frente a la boca del metro. Esperé junto a la puerta principal de una factoría en Petrogrado ,hasta que las sirenas dejaron correr ríos de hombres. Les disparé con la cámara como si apuntara a sus rostros con un revolver negro. Hablaban entre ellos, y cuando el papel vomitaba sus cuerpos al instante robados , traté de escuchar sus voces . Dicen del traductor que fue visto en la torre de Tatlin.Lo vieron trepar la fábula sin tablas y confiar la invención de la utopía a una corriente de magma que creyó columbrar desde lo alto. El traductor no estaba en la fábrica pero las máquinas han vuelto.

jueves, 18 de febrero de 2010

Patty Ice y Larie Lake


Larie Lake no es Patty Ice. Patty Ice no es Larie Lake.En el psiquiátrico no hay espejos. No hay superficies esmaltadas. No se han barnizado los suelos de barro para evitar reflejos. Ninguna superficie de agua en el jardín es grande y homogénea . De los baños arrancaron los azulejos. Las paredes son de yeso rasgado y la madera de vigas y rodapiés es mate. A Patty Ice le robaron el esmalte rojo de uñas hace mucho tiempo y recuerda vagamente cuando se asomaba al pequeño espacio lacado en en el extremo de sus manos para poder atisbar un fragmento de piel. Larie Lake ya no tiene sus zapatos negros de charol. Sobre ellos se precipitaban para verse. Algunas tardes confrontan sus cuerpos y pasan largas horas mirándose. Imaginan que se ven . Mi nariz, mis ojos , la comisura de mis labios, mi frente despejada. Un invierno con la ayuda de un foco proyectaron la sombra de sus perfiles en la pared y la dibujaron de manera meticulosa.

lunes, 8 de febrero de 2010

Cherry


Cherry es una mentirosa, dice que vivió durante meses escondida en el decorado de un barrio chino. Cuenta que su estancia coincidió con la llegada del año nuevo y que las calles que se encontraban detrás del empalizado de madera donde ella se ocultaba bullían de gente que bailaba hasta el amanecer . Que un día una mano colocó cerca de la maqueta un dragón y al día siguiente junto a este dejó una marioneta con cabeza de león.Al caer la noche se encendían los farolillos rojos que la mano depositó con esmero en la encrucijada de cables que trenzaban el cielo de la calle.Cherry dice que el tiempo que pasó allí fue la apariencia de una vida consumada .Escuchó a alguien hablar de una filmación, una historia de detectives, tal vez basada en una de esas novelas negras donde una mujer pide ayuda después de que su sombra se deje grabar tras un cristal translúcido donde vemos impreso el rótulo invertido del nombre de un pobre diablo en un despacho oscuro.Cherry cuenta que como no había espejos una mañana inclinó su cabeza con la intención de mirarse y que ese fue el instante en el que descubrió que un cable brotaba de su cabeza y que todo su cuerpo era una cámara de vigilancia. Cherry habla de esta cámara que ella era .

martes, 2 de febrero de 2010

Patty Ice

Canales de cobre verde, pistas de asfalto sobre la que irrumpe la velocidad del motor de las luciérnagas y el metal cromado de la noche. Pasadizos de hombres subterráneos que prometen en la escritura la tierra que cubre sus cabezas. Senderos que se pierden cuando llegan al bosque porque el bosque vive sin caminos. Un dedo que arrastra el vaho acumulado en el cristal y dibuja un trazo abandonado, una espiral . La acera que mengua veinte ojos más cumplidos. El hueco que el agua en la orilla horada en la planta del pie cuando se retira la ola tragando arena. El hueco que el agua horada en la planta del pie cuando se retira la ola tragando arena. El hueco que el agua horada en la planta del pie cuando se retira la ola tragando arena. Ese minúsculo precipitarse al vacío por un puñado de tierra bajo su cuerpo desaparecido. Patty Ice baila.

lunes, 1 de febrero de 2010

el viaje del traficante

Las horas se pudren bajo el agua y el aire oxida el barco del traficante. La multitud se ha dispersado. Los oradores esperan bajo el pórtico que cese la lluvia apretando con el puño el asa de un maletín cerrado. Nadie sabe ni se pregunta por el paradero del traductor. Es uno más de los perdidos en los jardines. Pero los días de viaje y los barcos varados en la montaña lo buscan aún. Lo busca el traficante que arrojó el cargamento de sal al mar para salvar la nave. Su capital se ha disuelto en el océano .

martes, 26 de enero de 2010

Valeria

Una montaña dentro de una habitación. Una montaña antigua que ha perdido el filo de sus cumbres. El monitor de la televisión despide un alud de neón, la sombra, el día, la casa, el aire, el habla, las carreteras secundarias, otros, la azotea, entran por el hueco de la caja y vuelven a irse, se desvanecen entre millones de puntos grises succionados desde el perímetro de la caja, siempre encendida, la máquina que produce y produce y produce , algo que quiere parecerse a la vida . Pero esta noche Valeria sueña que una mariposa aparece. Su propia voz, que descendía desde lo alto de la montaña, desde el perfil desgastado, una voz milenaria , dice mariposa, y se despierta, y la pantalla del televisor golpea de forma intermitente, todavía, la pared, la mesita de noche, la lámpara encendida, el suelo, la cara norte de la montaña , se apaga y enciende con la luz azul , entra en el cuarto de la montaña y enseña una maqueta mecánica de la esclavitud . Sale, y regresa con el ritmo de un parpadeo. Erosiona el interior de la habitación en el tiempo y el pequeño espasmo con el que una mariposa abre y cierra sus alas.Valeria recibe la presencia de la montaña en la habitación con absoluta indiferencia.

lunes, 25 de enero de 2010

Olvido Express


Olvido Express murió cuando bajaba desnuda una escalera. Casi al mismo tiempo, encaramada a una escalera de tijera , Lidia Delectorskaya borraba una pintura de Matisse y Leger imaginaba un mundo deshumanizado, hombres con voluntad robótica que bajan la escalera en la ciudad , atrapados por el sonido de dieciseís pianolas, dos pianos, tres xilófonos, siete campanas eléctricas, tres hélices, una sirena y un tam-tam. Más allá, un hombre subía una escalera bajo la atenta mirada del centurión en la crucifixión de Picasso . Y en el ocaso de esa tarde, en los fríos peldaños de la escalera rusa, los desolados personajes en escorzo en las fotografías de Rodchenko. Bajo el destello de la guerra y la feria,dormido, el doctor Caligari, entre el tumulto del espíritu de la época y el desolado abandono de los callejones, atraviesa en sueños escaleras imposibles, iluminadas débilmente desde varios focos de luna . En la escalera de Odesa se precipitaba el futuro que abría el abandono de las manos de una madre muerta.Pero antes de cerrar los ojos, Olvido Express me miró y como un canto al oído me susurró unos versos de Bretón:... La escalera se ramifica indefinidamente
Conduce a una puerta de haces de heno se abre de pronto sobre
una plaza pública
Hecha de dorsos de cisnes una ala abierta para el pasamano
Gira sobre sí misma como si fuera a morderse
Pero se contenta con abrir bajo nuestros pasos todos sus escalones
como gavetas
Gavetas de pan gavetas de vino gavetas de jabón gavetas de espejos gavetas de escaleras...


domingo, 24 de enero de 2010

lo que Patty Ice contó al traficante de sal

Creo que mi traductor ha salido de los jardines y se ha subido a las torres. Algunas veces lo descubría en la copa de los árboles y me decía que observaba el troquelado con que la luz delimita las fachadas al anochecer. Detrás de cada rectángulo iridiscente se ocultaba un posible escrito, aún mudo y encriptado, al resguardo de la luz en la oscuridad. Pronto los umbrales eléctricos de las casas de la avenida le parecieron fragmentos que debían ser completados, a lo largo del pais, a través de los neones en las autopistas, alcanzando los suburbios y reptando por los rascacielos nocturnos. Desde lo alto de las torres los veía despertar a la noche, bombilla a bombilla, luz a luz, como prehistoria de los anónimos.

domingo, 17 de enero de 2010

Patty Ice y Larie Lake


Patty Ice quiere arreglar el mundo. Camina pegando su cuerpo a las paredes porque teme caer al vacio. Cuando mira la retícula que el suelo dibuja ve un abismo . A veces sueña con el desembarco de su imagen interior tocando la tierra firme. Levantarse insecto y con la primera visión de la techumbre recomponer las coordenadas de un continente que se intuye ajeno. Incorporarse y mirar , pero primero, buscarse un nombre. Cherry, Olvido Express, Valeria. Buscarse órganos y sangre. Buscarse la memoria. Antes de poner el pie en el plano huidizo del día, del mes, del año, de la hora , buscarse en la pantalla gelatinosa que como larva despierta.
Sé que estoy en una cápsula, le dijo Patty Ice a Larie Lake.
Larie Lake le enseña entonces a Patty Ice a mantener el equilibrio sobre las olas.

martes, 12 de enero de 2010

Cherry




Cherry es una mentirosa, dice que fue la única puta que habitó en un rancho perdido en el Valle de Amargosa , en Nevada. Cuenta que tenía un cliente, un fabricante de jabón, que provenía de los lagos. Cherry siempre sospechó que lo que realmente hacía con el bórax era adulterar heroína. Lo olfateaba como si fuera una presa muerta , buscando el suave olor del jabón. Las horas paseaban silenciosas entre los cactus y los chaparros que rodeaban la casa, entre una nube de polvo que se alejaba en la carretera y volaba sobre un cedro negro. Cherry dice que casi todos los días se sentaba frente a su viejo televisor para ver Zabriskie Point , la película de Antonioni que dejó olvidada un falso descendiente del zar Nicolas II y que le confesó entre sollozos que nació y vivió toda su vida en Fresno, pero que su corazón fue siempre una blanca y fría estepa rusa. Cherry habla de su recuerdo más vivo de aquellos años , el color rosa chicle de la fachada, un rectángulo de fresa en el desierto golpeado contra el cobalto.

miércoles, 6 de enero de 2010

el viaje del traficante

Y entonces veo que el maletín que traía ella era uno de esos gramófonos pequeños. No había duda, cerrado y todo era tan bonito como un cuadro, y cada vez que nos llegara un disco nuevo por correo y nos reuniéramos en casa a oírlo en invierno, pensaría que era una pena que Darl no lo disfrutara también. pero para él es mejor así. Este mundo no es su mundo; esta vida no es su vida.
WILLIAM FAULKNER, Mientras agonizo


El traficante de sal ha perdido el barco en las montañas y tiene que financiar el viaje para poder continuar con la búsqueda. Ha traído una maleta que lleva a todas partes. Cuando la abre , después de un estudiado ritual , todos callan a su alrededor. Los de las últimas filas, que apenas alcanzan a ver su cabeza, especulan sobre el valor de la mercancia. Esto es tanto más extraño si tenemos en cuenta que nadie ha podido verla. El traficante de sal ha puesto a la venta los sueños de occidente. Una turba lo rodea. La confusión se adueña del cuerpo de hombres y mujeres en la sala. Una niña corre en círculos y anuda y desata compulsivamente los lazos de sus trenzas. Un sonido lacónico surge desde el interior del malatín. Todos parecen inquietos y no se hacen preguntas. Esto es lo más inquietante.